Domingo productivo.

El domingo, después de fiestas y desveladas del fin de semana me llamaron mis amigos para invitarme al zoológico, al principio dudé y mi cama me pedía a gritos que no me levantara; pero después pensé ¿porqué no ir y salir un poco de la monotonía? Con todo el esfuerzo del mundo tome un baño y me dirigí a su casa donde todos ya esperaban para partir.


En el camino, que en ese momento me pareció eterno, pude ir despertando con los paisajes montañosos que se pueden ver a lo largo de éste, el cielo claro y la luz del sol, aparte de tener una amena compañía. 55 minutos después de haber salido de Monterrey llegamos al Bioparque Estrella, una gran extensión plana rodeada por las montañas. Donde la atracción principal es ver a los animales libres y poder interactuar con ellos de cerca; alimentándolos y acariciándolos. Que para mí, amante de los animales resulto una experiencia muy grata y divertida, más al momento de acercarnos a las jirafas y que te quitaran la comida con sus largas lenguas.

Durante el recorrido por el parque.

Este es un lugar recomendado para todos, solo decídete y aunque te cueste trabajo separarte de tu almohada, sal, conoce y disfruta de algo diferente, definitivamente no te vas a arrepentir.

Carpas Koi.

 Los pequeños momentos son los que hacen de la vida más dulce.

Ubicado a 55 minutos de Monterrey, 
Carretera a Rayones km. 9, Montemorelos N.L.

Escrito por: Andrea Lizárraga

Real de Catorce

El fin de semana pasado tuve la fortuna de visitar un lugar que desde hace tiempo me intrigaba, y tenía deseos de conocer, Real de Catorce el famoso pueblo minero que después de explotar todos sus recursos minerales, principalmente la plata, estuvo apunto de convertirse en un lugar fantasma, lo cual lo hace misterioso y crea una atmósfera que da curiosidad y te hace querer saber más sobre la historia del lugar.

En este pueblo mágico se pueden experimentar todo tipo de sentimientos y ver escenarios que difícilmente se pueden hallar en otro lado. Entre ellos uno de los cielos nocturnos más bonitos que he visto, donde la luna se oculta en las montañas de la sierra y no es poco común ver estrellas fugaces; un desierto lleno de misticismo al cual los indígenas huicholes asisten desde muchos rincones del país para comer su cactus sagrado, el peyote. 

También las montañas en las cuales realizan sus rituales al fuego y marcan el fin de su viaje. A esta remota zona montañosa se puede accesar a caballo, lo cual lo vuelve un recorrido sin igual; muy divertido y con las vistas más impresionantes tanto del pueblo como del desierto. 

Real de catorce es un lugar altamente recomendado para quienes van en busca de algo fuera de lo común y aventura.

 Parroquia de la Purísima Concepción de Real de Catorce.

 Artesanías hechas por los huicholes

Vista del desierto.

 Recorrido por las montañas.

Viaja, disfruta y conoce.

Escrito por: Andrea Lizárraga

Un día en Saltillo

Los domingos son definitivamente hechos para salir de la rutina, y qué mejor forma de hacerlo que consintiéndose a uno mismo con un pequeño viaje que te haga olvidarte de todo un rato y disfrutar algo distinto. En esta ocasión mi destino fue Saltillo, Coahuila que sinceramente nunca me había pasado por la mente ir, pero recibí la invitación y me animé. En definitivo quedé gratamente sorprendida ya que es un lugar rico en historia, limpio y que al ver sus plazas y edificios te hace regresar a los tiempos de la revolución. También cuenta con varios museos muy interesantes y restaurantes que hacen que valga la pena la visita por sí mismos, entre ellos está Montero, nueva cocina rústica que se encuentra ubicado en una casa antigua en el centro de la ciudad y cuenta con un concepto muy novedoso e interesante y una comida excelente, altamente recomendable. 

Catedral de Saltillo.

  Mural en el palacio de gobierno

 

Pancho Villa con sus revolucionarios en Saltillo.

 Shots de sotol en restaurant Montero

Martini blanco con agua de rosas, pepino y menta y Mojito de frutos rojos.

 Gorditas de chicharrón.

 Lechón al ataúd.

Merengue de nuez con reducción 

de balsámico y bayas.

¡La vida es un viaje!

Escrito por: Andrea Lizárraga

De vuelta en casa

Después de un verano increíble y lejos de casa llegó el tiempo de regresar a mi tierra y qué mejor que a un lugar tan hermoso como Mazatlán, México; bonitas playas, los mariscos más deliciosos, gente amable y los mejores atardeceres que haya visto en mi vida. Es de esos lugares que una vez que estas mucho tiempo ahí ya no te quieres despegar de él.

 El faro natural más grande del mundo.

 El día perfecto...

Aguachile de callo de hacha y pescado zarandeado en "La Corriente"

Obra de artistas locales

Las tres islas.

Escrito por: Andrea Lizárraga

Kyoto bajo la lluvia

Tradición, cultura e historia; no hay otras palabras que puedan describir mejor a Kyoto, la antigua capital de Japón, donde se encuentran la mayor cantidad de templos y edificios milenarios del país. Cuando estás en esta ciudad te transportas en el tiempo y puedes ver la apreciación de la belleza y la perfección en cada esquina del lugar. Tanto en sus templos, como en sus jardines, pinturas, esculturas y en su delicada cocina; que aprecia el sabor de cada ingrediente y deja en claro que la vista come primero que la boca.

Por ser mi tercera vez en Kyoto decidí mejor relajarme y visitar pocos lugares para poder apreciar cada detalle, ya que anteriormente ya había ido a la mayoría de los destinos de la ciudad. Sentarme, tomar té verde y ver los jardines de piedra...

Jardines de piedra.

Templo Kyomizu. 

México en el mundo.

Geisha en las calles de Gion

Kyoto Tower

Escrito por: Andrea Lizárraga